Este edificio de viviendas situado en Tiana, cerca de Barcelona, dispone de una localización próxima al mar, visible solo con elevarse levemente del plano de la calle.
El proyecto precisamente persigue este objetivo y se eleva todo lo posible mediante una planta sótano. Las siguientes 4 plantas se destinan a los apartamentos. La fachada que da a la calle se inclina y gira para orientar las vistas hacia el mar.
La planta sótano ocupa gran parte de la parcela con la zona de garaje y trasteros, permitiendo que en su cubierta se establezcan zonas de jardines privados de las viviendas, con un espacio exterior a distintos niveles, zonas de porche y piscinas marcando una extensión del espacio interior de las casas.
El resto de plantas disponen de 2 apartamentos cada uno de unos 90 m2. Se juega con la variabilidad de tipologías, configurando un dúplex con piscina, un ático con terraza, un apartamento con jardín exterior, etc.
El edificio dota de la misma importancia a todos los apartamentos, tanto a los que disponen de vistas al mar, como a los que disfrutan de vistas hacia la montaña y al espacio exterior. Todas las viviendas tienen al menos 3 orientaciones, ventilación cruzada y todos sus espacios tienen luz y ventilación natural.
Mayoritariamente constan de 3 habitaciones y salón-comedor-cocina abierto, con vistas hacia el exterior mediante los ventanales que dan a la terraza. Se combinan tonos negros y blancos en su interior que, junto al mobiliario y a los materiales, generan un ambiente moderno y agradable para que sus habitantes lo hagan suyo.
Este juego de tonalidades y materiales se extrapola también al exterior donde en las fachadas permiten diferenciar una planta de la otra, como si estas fueran independientes. El diseño encaja el “escalonado” del edificio integrándolo en el diseño. Las terrazas sobresalen del plano de fachada para remarcar su importancia y dan a las viviendas una zona cubierta de espacio exterior. Es en la fachada principal donde mediante la composición de esta se conectan entre sí las diferentes plantas para darle continuidad a la fachada del edificio.
Un espacio idílico para vivir cerca de Barcelona, con impresionantes vistas al mar y con un entorno exterior propio del edificio perfecto para entablar una relación con el resto de habitantes.
SITUACIÓN:
TIANA, BARCELONA
AÑO:
2023
SUPERFÍCIE:
970 M2
ARQUITECTOS:
CRISTINA MORA + DAVID JIMENEZ
COLABORADORES:
MARC MARIMÓN + NINO SCIUTO
APAREJADOR:
EDUARD BELTRÁN
CALCULO:
FRANCESC GORGAS
CONSTRUCTORA:
HABITAT LAND MARESME